Un residente de Telde, Gran Canaria, sufrió una estafa de 135.000 euros relacionada con criptomonedas, pero la Policía Nacional recuperó los fondos. Los estafadores prometían ganancias irrazonables y desvíaban los activos a monederos controlados, usando excusas para seguir extorsionando a la víctima.
El Grupo de Delincuencia Económica y Fiscal investigó el caso con tecnología blockchain, rastreando los fondos a monederos de los criminales. Esto permitió identificar activos adicionales de 456.707 euros y desmantelar el esquema delictivo.
Las criptomonedas, aunque innovadoras, son usadas por ciberdelincuentes por su anonimato, pero las herramientas de rastreo han demostrado su eficacia al devolver activos a propietarios legítimos.
Ante el aumento de estafas, se enfatiza la importancia de no caer en promesas de ganancias rápidas y valorar la tecnología y colaboración entre autoridades para combatir fraudes digitales.
